La Guerra Fr�} entre Este y Oeste ha finalizado, pero la
situaci�n internacional actual contin�a inestable y su futuro
no es transparente. No obstante, los continuos esfuerzos que la
comunidad internacional est�Erealizando en pos de la paz y la
prosperidad est�n dando gradualmente resultados. Hay progresos
visibles para la soluci�n de conflictos regionales de la
ex-Yugoslavia y del Medio Oriente. En la regi�n de Asia y el
Pac�ico tambi� est�n apareciendo movimientos tendientes a
solucionar el problema de armas nucleares de Corea del Norte. el
deber de la comunidad internacional es transformar estos
movimientos favorables en una corriente s�lida y estable, y de
esa manera ir consolidando un nuevo esquema Post-Guerra Fr�}.
Al reflexionar sobre el rumbo de la diplomacia japonesa, creemos
que cuando se est�Eprofundizando en la interdependencia mutua
entre los estados bajo esta situaci�n internacional, la
seguridad y prosperidad del Jap�n s�lo son posibles si se logra
la paz y la prosperidad de la comunidad internacional. desde esta
�ptica, Jap�n tom�Ecomo eje de su pol�ica exterior su
relaci�n con los Estados Unidos, atendiendo preferentemente al
fortalecimiento de las relaciones de amistad y cooperaci�n entre
las distintas regiones del mundo, tales como con los pa�es de
Asia y el Pac�ico, Am�ica Latina y Europa. As�Emismo, el
Jap�n se esfuerza por asegurar la prosperidad y el desarrollo
sostenido de la comunidad internacional, y por mantener y
fortalecer el sistema de comercio multilateral libre, teniendo en
cuenta el inicio de las actividades de la Organizaci�n Mundial
de Comercio (WTO). Respecto a los problemas de escala mundial,
tales como la alimentaci�n, la poblaci�n, la preservaci�n
ambiental, la energ�}, la drogradicci�n, etc., a los que la
humanidad se enfrenta de cara al siglo XXI, nuestro pa� los ha
definido como �reas prioritarias y est�Eabocado a su soluci�n.
Esta pauta b�sica de la pol�ica exterior japonesa se
aprecia claramente en su diplomacia hacia Am�ica Latina.
Teniendo en cuenta la nueva situaci�n latinoamericana, y bajo
estrecha cooperaci�n con los pa�es de la regi�n, el Jap�n
tiene el prop�sito de continuar contribuyendo activamente a la
estabilizaci�n y desarrollo de la regi�n, y en definitiva, a la
paz y prosperidad mundiales.
En los a�os 80, denominados "la d�cada perdida", los
pa�es latinoamericanos tuvieron que enfrentarse a la triple
dificultad planteada por el escaso crecimiento econ�mico, la
alta inflaci�n y la acumulaci�n de la deuda externa. Sin
embargo, en los a�os 90 se vienen produciendo en estos pa�es
una serie de din�micos movimientos de renovaci�n, tales como la
adopci�n de una pol�ica exterior pragm�tica, basada en la
concertaci�n internacional y la cooperaci�n interregional,
promoviendo activamente la democratizaci�n y las reformas
econ�micas.
Casi todos los pa�es del continente americano han llevado a
cabo procesos de democratizaci�n pol�ica, cuyo �xito se ha
visto confirmado a trav�s de la serie de elecciones
presidenciales que se han venido realizando desde 1994 hasta el
momento. Por otra parte, los �dices macroecon�micos de todos
estos pa�es muestran una mejor�} notable comparados con los
correspondientes a los a�os 80. Adem�s, el "efecto
tequila" provocado por la crisis monetaria mexicana ocurrl�E
a finales de 1994, ya se ha superado casi totalmente, gracias a
la cooperaci�n internacional y al programa econ�mico de ajuste
de los pa�es vecinos, de modo que la econom�} de todo el �rea
latinoamericana muestra una clara tendencia hacia la
recuperaci�n. Latinoam�Erica, por tanto, con su poder
econ�mico potencial y en este ambiente de estabilidad pol�ica
y econ�mica que favorece positivamente los movimientos de
integraci�n regional, la expansi�n del comercio interregional y
el surgimiento de un mercado a gran escala atrae poderosamente la
atenci�n del resto del mundo.
�ltimamente est�n tomando renovado impulso entre los pa�es
latinoam�ricanos movimientos de integraci�n econ�mica
regional, la expansi�n del comercio y el nacimiento de un nuevo
mercado ampliado, lo cual, junto a la atracci�n que despierta su
potencial econ�mico, hace de esta regi�n un verdadero foco de
atenci�n para el resto del mundo.
En adecuaci�n a la nueva situaci�n latinoamericana, nuestro
pa� ha fijado como objetivos pol�icos b�sicos de su
diplomacia hacia Am�rica Latina, "El afianzamiento de la
estabilidad a largo plazo", "La consolidaci�n del
r�gimen democr�tico y del sistema de econom�} de mercado"
y "El fortalecimiento del mecanismo de cooperaci�n
internacional". Para lograr estos objetivos, apoyamos
"las Dos D", es decir, "Democracia y
Desarrollo". Quisiera enfatizar que en este trasfondo hay
una firme convicci�n por nuestra parte de que la
democratizaci�n y el desarrollo econ�mico deben ser tomados
como sendas ruedas de un veh�ulo, ya que con una sola no se
puede lograr la verdadera paz y prosperidad.
La
pol�ica exterior del Jap�n hacia Am�rica Latina y el
Caribe